Según el credo y la nacionalidad de quien las narra, diferentes leyendas cuentan que es la luna, Jesucristo, o Santo Tomé quién creó la Yerba Mate, en agradecimiento a la hospitalidad de los hombres buenos, que siempre están representados por una familia de guaraníes. Sea quien fuere el artífice de tan bondadosa planta, todos coinciden en señalarla como una bendición del cielo y un símbolo de amistad. Esta es una versión ilustrada sobre el origen de la Yerba Mate, basada en una de las tantas versiones de la leyenda:
“Yací, la luna, alumbra desde el cielo misionero las copas
de los árboles y platea el agua de las cataratas. Eso es todo
lo que conocía de la selva... pero un día bajó a la tierra
acompañado de Araí, la nube, y juntas, convertidas en
muchachas, se pusieron a recorrer la selva.”
“El rumor de la selva las invadió, por eso era imposible que escucharan
los pasos sigilosos del yaguareté que se acercaba, agazapado,
listo para sorprenderlas, dispuesto a atacar. Pero en ese mismo instante
una flecha disparada por un viejo cazador guaraní que venía siguiendo al tigre
fue a clavarse en el costado del animal. La bestia rugió furiosa...”
“Fuiste muy valiente, por eso voy a entregarte un premio y un secreto.
Mañana, cuando despiertes, vas a encontrar ante tu puerta
una planta nueva: llamada caá...
acerca los corazones y ahuyenta la soledad.”